En la víspera del día que la Comisión de Evaluación Ambiental de Aysén decida si aprueba o rechaza el Estudio de Impacto Ambiental del proyecto Hidroaysén, organizaciones ecologistas han llamado al ministro Golborne a “no esconderse tras la normativa ambiental” y a asumir la responsabilidad de una decisión que tendrá un alto componente discrecional y que será adoptada en definitiva por autoridades políticas de confianza exclusiva del Presidente Piñera, no por técnicos.
Luis Mariano Rendón, coordinador de la agrupación “Acción Ecológica”, señaló hoy que “Reiteradamente el ministro Golborne ha querido instalar en la ciudadanía el discurso de que aquí estaríamos ante una decisión de carácter exclusivamente técnico y que si el proyecto cumple con la normativa se aprobará y de lo contrario se rechazará. Ello es una falacia, porque precisamente, los estudios de impacto ambiental, a diferencia de las declaraciones de impacto ambiental, se deben realizar cuando existen “impactos no normados”, es decir cuando no hay ninguna norma que nos diga qué magnitud o intensidad del impacto resulta tolerable y cuál no. Decidir si esos impactos no normados se consideran tolerables o no, se hace caso a caso, mediante una decisión “discrecional”, es decir que aplica “criterio”. Ese criterio, o descriterio, lo aplicarán en definitiva autoridades políticas que son todas, de exclusiva confianza del Presidente de la República”, explicó.
Rendón agregó que los impactos no normados en el caso de Hidroaysén son gigantescos, como el impacto en el valor paisajístico o turístico de la zona, o la alteración de los sistemas de vida y costumbres de grupos humanos. “Por ello el componente discrecional de la decisión será también gigantesco”.
El dirigente ecologista señaló finalmente que, gracias a la reforma a la Ley de Bases del Medio Ambiente impulsada por la ex-presidenta Bachelet, fueron excluidos de la decisión ambiental los únicos representantes de la ciudadanía regional, que eran los consejeros regionales. “Por eso mañana lo que tendremos, será una decisión con un alto componente discrecional, tomada exclusivamente por políticos que representan el poder central. Llamamos al ministro Golborne a asumir valientemente esa responsabilidad del Gobierno y a no esconderse como ha hecho hasta ahora, tras supuestas decisiones técnicas que se limitarían a aplicar normas, lo que no resulta efectivo”.