Un alto official de la OTAN admitió que los servicios de inteligencia han descubierto elementos de Al Qaeda entre los guerrilleros rebeldes libios, quienes a su vez están recibiendo apoyo militar y táctico de unidades estadounidenses y europeas localizadas al interior del país. Esta aseveración confirma que grupos fundamentalistas islámicos son parte de la oposición a Gaddafi, la que es apoyada por las potencias europeas y la OTAN.
“Estamos analizando esta información, su composición, las figuras que la componen y quiénes son sus líderes”, dijo el almirante James Stavridis, comandante supremo de la OTAN, de Europa y del comando europeo estadounidense. Hemos visto señales en la inteligencia de potenciales Al Qaeda, Hezbollah.
La información proporcionada por Stavridis se relaciona con el reconocimiento hecho por el jefe de los rebeldes la semana pasada en cuanto entre los guerrilleros hay grupos islámicos que han combatido contra las fuerzas de ocupación estadounidenses en Irak
Por su parte, la embajadora de Estados Unidos ante la Organización de Naciones Unidas, Susan Rice, dijo que su país podría armar a las fuerzas que se oponen al líder libio, Muamar el Gadddafi. En declaraciones a la televisora ABC, la diplomática aseguró que aún no hay una decisión en ese sentido, pero es una posibilidad que no está excluida a priori.
Mientras, la cadena de televisión Al Arabiya informó este martes que aviones de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) atacaron varios objetivos en la capital Libia, donde se escucharon fuertes explosiones en el sector este.
Fuentes libias dijeron posteriormente que las bombas impactaron zonas residenciales y militares en la capital y en las ciudades de Misrata, Zenten, Uatiya y Mizdah.
Al respecto, El Gadafi exigió hoy el fin de los bombardeos de la coalición internacional contra sus fuerzas en momentos en que se abría una reunión de países occidentales y árabes en Londres para respaldar la intervención militar.
Las naciones atacantes acordaron este martes proseguir la acción militar hasta que El Gaddafi cumpla con los términos de una resolución de la ONU que presuntamente estaba dirigida a proteger a civiles
En tanto, grupos pacifistas manifestaron hoy en Londres su condena a la ofensiva militar en Libia y reclamaron el cese inmediato de los ataques perpetrados contra ese país desde hace 10 días.
La protesta aconteció de forma paralela a una cumbre internacional que reunió en esta ciudad a los integrantes de la coalición extranjera que lleva a cabo las operaciones contra territorio libio.
Con pancartas en las que se leía “No a la guerra por petróleo” y “Manos fuera de Libia”, los antibelicistas reiteraron que la misión militar que comanda ahora la OTAN no ayudará a esa nación árabe.
Recordaron que lo mismo pasó en naciones como Iraq y Afganistán y advirtieron que los bombardeos aéreos de las fuerzas internacionales conducirán inevitablemente a la muerte de civiles.
Los gobiernos de Estados Unidos, Francia y Reino Unido encabezan la ofensiva contra Libia desde el pasado 19 de marzo, amparados en la resolución 1973 que aprobó dos días antes el Consejo de Seguridad de la ONU.
Dicha resolución establece la implementación del bloqueo naval frente a las costas de ese país norafricano e incluye, excepto una ocupación militar, “todas las medidas que sean necesarias”.
El domingo último los 28 embajadores de la OTAN decidieron que esa organización asumiese el mando militar y político de las operaciones, en sustitución del gobierno estadounidense.
Según el líder libio, Muamar El Gaddafi, los ataques lanzados por los aliados contra su país en virtud de la resolución de la ONU han ocasionado la muerte de decenas de civiles libios y heridas a miles de ellos.